Las pastillas son componentes clave dentro del sistema de freno de un vehículo, encargándose de la detención de los neumáticos. Pueden estar fabricadas en distintos materiales y componentes, variando sus características y funciones.
En este post te vamos a explicar para qué sirven las pastillas de freno, su importancia para la seguridad, cómo mantenerlas y qué tipos existen, con sus especificaciones y características.
¿Para qué sirven las pastillas de freno de un auto?
Las pastillas de freno de un auto generan fricción contra los discos de la rueda. De este modo, se aminora y detiene el movimiento total del vehículo. En palabras simples, sirven para reducir la velocidad y frenar de manera segura.
Están hechas de elementos que resisten las altas temperaturas, como puede ser cerámica, compuestos de carbono y semi sintéticos. Tienen un soporte metálico que se fija al sistema de frenado para amortiguar la presión al momento de frenar.
La presión es controlada por el sistema hidráulico, el cual cuenta con líquidos de freno que transmiten la fuerza ejercida desde el pedal hacia las pastillas ubicadas en el neumático.
La importancia de las pastillas de freno para la seguridad del vehículo
Las pastillas de freno otorgan seguridad en el andar del vehículo, destacando por:
- Controlar la velocidad de los neumáticos, disminuyendo el andar según la presión ejercida sobre el pedal.
- Detener el vehículo de manera efectiva.
- Reducir la distancia que el vehículo necesita para detenerse por completo.
- Otorgar estabilidad durante el frenado, con un control óptimo y evitando el bloqueo de las ruedas.
- Brindar mayor control en distintos terrenos, como pueden ser rutas mojadas o congeladas.
- Prevenir el desgaste de otros componentes existentes en el sistema de frenado, especialmente de los discos.
Por esta razón, es importante mantener las pastillas de freno en buen estado y reemplazarlas cuando sea necesario, previniendo posibles accidentes y proporcionando un viaje seguro.
Tipos de pastillas de freno
Las pastillas de freno pueden presentarse en distintos tipos, siendo las más reconocidas:
Pastillas de Freno Orgánicas
Están compuestas principalmente de fibras y resinas. Estos materiales otorgan un frenado suave y silencioso, además de generar menos desgaste. Resultan ideales para conducción diaria y moderada.
Pastillas de Freno Bajas en Metal
Contienen una mezcla de materiales metálicos y no metálicos como el hierro, cobre y acero, entre otros. Destacan por combinar una mayor precisión de frenado, resistencia al calor y durabilidad, así como por generar menos ruido y vibraciones al manejar.
Pastillas de Freno Semi Metálicas
Están hechas de elementos como hierro, cobre y acero y otros aditivos. Son más potentes y resistentes al calor que las orgánicas, lo que las hace adecuadas para vehículos que requieren un mayor control de frenado, como lo son los deportivos, camionetas y utilitarios.
Pastillas de Freno de Cerámica
Este elemento se compone de cerámica y otros materiales de alta calidad. Son conocidas por proporcionar un frenado consistente, incluso en condiciones extremas. En comparación con otras opciones, genera menos polvo al reducir la velocidad, además de ser más resistentes al alto rendimiento.
Mantenimiento de las pastillas de freno
El mantenimiento de las pastillas de freno garantiza un funcionamiento seguro del vehículo. Algunos consejos importantes para su cuidado son:
- Revisar los signos de desgaste o daño, como grietas y rajaduras, prestando especial atención a su espesor y posibles fugas. Si las pastillas están muy delgadas o consumidas, es momento de un cambio.
- Rellenar el depósito de líquido de frenos, siguiendo las indicaciones del fabricante. Es importante no excederse en la cantidad porque esto podría provocar un aumento de la presión y dañar el sistema de frenado.
- Comprobar la eficacia del freno de estacionamiento.
- Luego de su instalación, se recomienda un andar suave sobre superficies de ciudad, evitando maniobras o frenadas bruscas. Las pastillas se adaptan gradualmente al sistema de frenado durante los primeros kilómetros.
Además, es importante revisar regularmente otros componentes, como discos, pinzas y líneas de freno, para garantizar un funcionamiento óptimo y seguro del sistema en su conjunto.
¿Cómo sé si debo cambiar las pastillas de freno?
Para saber si es necesario hacer un cambio de pastillas de freno, es recomendable seguir estos pasos:
Inspeccionar el espesor
Se debe verificar el grosor de las pastillas. Si están muy desgastadas y el material de fricción se encuentra cerca del límite, es momento de cambiarlas. Es posible observar que muchas pastillas incluso traen marcas para que sea más fácil ver cuál es el punto de no retorno.
Observar el nivel de líquidos de frenos
La falta de líquido de frenos en el depósito puede indicar un desgaste significativo de las pastillas, ya que su volumen en el sistema disminuye con el tiempo. Este problema es fácilmente detectable durante el mantenimiento regular del vehículo.
Atención a indicadores en el tablero del auto
Se debe prestar especial atención a los indicadores de fallas en las pastillas. Los vehículos más nuevos suelen incluir sistemas para monitorear su desgaste, contando con una luz de advertencia en el tablero. Otro signo de alarma es escuchar un chirrido al frenar. En ese caso, es mejor revisar el vehículo lo más pronto posible.
¿Cada cuántos kilómetros cambiar las pastillas de freno?
Las pastillas de freno son un componente clave de los vehículos y se cambian cada 20.000 a 40.000 km, según el tipo de pastilla. Por ejemplo, las metálicas tienen mayor durabilidad que las orgánicas, pero afectan los rotores con mayor rapidez.
¡Revisa las pastillas de freno para garantizar la seguridad de tu vehículo!
Las pastillas de freno son un componente clave para la seguridad y rendimiento vehicular. Su revisión regular es importante y se deben cambiar en el caso de ser necesario, evitando el riesgo de accidentes a causa de reacciones lentas.
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